Inmenso jardín del litoral, el valle de Saire es un territorio vivo en el que tierra y el mar juegan al escondite. En julio de 2008, las torres de Tatihou y de La Hougue, obras de Vauban, fueron clasificadas como patrimonio mundial de la Unesco.

UN ENtorno ORIGINAL

En este pequeño pedazo de tierra se mezclan un patrimonio cultural excepcional y una naturaleza protegida. Su bonito nombre viene de los Vikingos que poblaron la región de Normandía. Puerto de salida de las tropas de Guillermo el Conquistador antes de la conquista de Inglaterra, Saint-Vaast vio su nombre entrar en la historia durante la batalla de La Hougue en 1692.

lever du soleil sur l'île de Tatihou
La isla de Tatihou © Arnaud Simon

Puerto de pesca y de recreo

Tercer puerto de pesca de la provincia de la Mancha, Saint-Vaast-la Hougue es también un famoso centro ostrícola.  Los senderistas encontrarán decenas de kilómetros entre los caminos que serpentean por el boscaje y el imprescindible sendero de los aduaneros que se extiende desde Saint-Vaast hasta la ensenada de Brick. Lugar entrañable para los veraneantes, este lugar atrae a numerosas regatas.

La isla de TATIHOU, PAraiso ORNITológico

La espléndida isla, verdadero paraíso ornitológico, se transforma en península con marea baja. Esta encantadora isla está dominada por la torre Vauban y sus fortificaciones. Los muros de granito y techos de pizarra de las casas se funden con armonía con los colores del litoral, de sus dunas y de estas rocas salpicadas por el oleaje. Para alcanzar la isla, ¡sube a bordo del barco anfibio! Con marea baja, se desplaza entre los parques de ostras. Con marea alta, une la isla de Tatihou y Saint-Vaast, en pocos minutos. Otra solución: alcanza la isla durante la marea baja.

Visitas que no te puedes perder en la isla de TATIHOU

  • Visitar el museo marítimo acoge colecciones arqueológicas sobre los restos de la flota real hundidos durante la batalla de La Hougue en 1692. Presentan colecciones etnográficas y las claves para entender la isla, los secretos de su formación como los de su fauna y de su flora.
  • Pasear por los jardines de Tatihou: el viento de alta mar agrede permanentemente a la flora de Tatihou. De ahí, la idea de protegerla entre diques y múreles creando un paseo encantador por el gran jardín marítimo, el jardín de “decouvertes”y el jardín de aclimatación.
  • Subir a la Torre Vauban: con una anchura de 20 m de diámetro y una altura de 21 metros, ofrece unas magníficas vistas sobre la isla y el litoral. 
  • En verano, descubre su festival de música: Les Traversées Tatihou
  • Disfruta de un momento relajante comiendo o tomando algo en el Goëland 1951, frente a la isla de Tatihou.

SAINT-VAAST, un pueblo con encanto

  • Visiter la Torre de La Hougue, construida en 1694 por un amigo de Vauban. En este lugar se pueden observar los alcatraces y otros grandes cormoranes.
  • Degustar las ostras de Saint-Vaast-la-Hougue y visitar los parques ostrícolas.
  • Parada en la Maison Gosselin,  tienda de productos gastronómicos y vinos desde 1889.
  • Embarca hacia Tatihou a bordo del barco anfibio.

Visitas que no te puedes perder

  • Museo marítimo 
  • Los jardines de Tatihou
  • Torre Vauban 
  • Torre de La Hougue

Qué ver en los alrededores