San Sulpicio fue obispo de Bayeux en el siglo IX. Fue masacrado en Livry en 844 por los daneses
La capilla se construyó en el lugar de su martirio. Según la tradición, tras la marcha de los invasores, los fieles que habían huido regresaron y encontraron el cuerpo de su obispo. Cavaron una tumba para él cerca de una fuente y sobre su tumba construyeron una capilla. Se hizo famoso por los milagros que tuvieron lugar allí, y más tarde el lugar se llamó Val Saint. Las reliquias de San Sulpicio fueron robadas por Simón, abad de San Ghislain, en Hainaut, a su regreso del Mont-Saint-Michel.
El oratorio data del siglo XII y pertenecía a la abadía de Ardenas, cerca de Caen. Fue vendido como bien nacional en 1794 y luego demolido. La capilla fue reconstruida en 1891.
Desde hace mucho tiempo, se realizan aquí peregrinaciones para curar las enfermedades de la piel. En el interior hay una estatua de San Sulpicio y muchos ex votos.
La asociación de los Amigos de la Capilla de San Sulpicio restauró la capilla tras los graves daños causados por la tormenta de 1999.
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