Después de visitar Lisieux y sus jardines, como el Arboretum, el jardín del Obispo o el jardín arqueológico, nos acercamos a Cambremer. En este pueblo nos encontramos con un jardín de 3 hectáreas salpicado de pequeños edificios pintorescos con entramado de madera, jardines de agua, rosas, plantas perennes, plantas de colección. ¡Una preciosidad!
A continuación, seguimos hacia Ouilly-le-Vicomte, situado tan solo a 5 kilómetros al norte de Lisieux. Visitamos el castillo de Boutemont, construido entre los siglos XII y XVIII. ¡Para mí fue un auténtico viaje en el tiempo! Este castillo es un testimonio perfecto de la Edad Media. Además de su jardín de estilo francés, nos encontramos con otro de estilo italiano, con el conocido como “Pequeño jardín de perfumes”, y con creaciones más recientes como el templo de Salomón o el jardín de las mariposas. ¡Un maravilloso conjunto que rodea el castillo y su foso seco!
Pasamos la noche en Deauville.